El 11 de diciembre de 2024 COPAPROSE organizó el conversatorio titulado «Sector Asegurador: Aprendizajes 2024 y Visión 2025», un evento que marcó el cierre de la Certificación Iberoamericana COPAPROSE 2024. La actividad reunió a destacados referentes del sector asegurador y reasegurador para reflexionar sobre los desafíos y logros del año que termina y plantear estrategias para el futuro.
Entre los panelistas estuvieron Elisabeth Vogt de Weber, Presidenta de COPAPROSE; Recaredo Arias, Conferencista, Asesor de Insurtech, Ex Ceo de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) y Expresidente de la Federación Global de Asociaciones de Aseguradoras (GFIA); y Horst Ágata, Senior Marketing Manager de Gen Re para Latinoamérica y España. Cada uno compartió sus perspectivas sobre temas claves como la adaptación del sector a nuevas normativas, la transformación digital y el impacto de las tendencias económicas globales en los seguros.
La sesión inició con una intervención de Vogt de Weber, quien destacó el papel de COPAPROSE en fortalecer la colaboración regional y la formación de sus miembros a través de la Certificación Iberoamericana COPAPROSE 2024, la cual fue un éxito. «Los aprendizajes de este año son un trampolín hacia una visión renovada del futuro», afirmó. COPAPROSE en el 2025 continuará liderando estas iniciativas para promover el crecimiento y la integración del sector asegurador y reasegurador en Iberoamérica.
El conversatorio se basó en una sesión interactiva en la que los participantes debatieron ideas sobre tres importantes temas que impactaron al sector asegurador en el 2024, y cómo afrontar los retos del 2025, reafirmando el compromiso del gremio asegurador con la excelencia y la adaptabilidad.
Reflexiones sobre la Transformación Tecnológica en el Sector
En el conversatorio, Recaredo Arias, presentó una visión estratégica sobre temas clave que están transformando el ámbito asegurador. Destacó cómo la pandemia del COVID-19 aceleró el cierre de brechas tecnológicas en la industria aseguradora. Entre los principales avances, mencionó:
- Inversiones digitales: Crecimiento en áreas como ajustes de siniestros, distribución y ventas mediante procesos electrónicos.
- Inteligencia artificial contra el fraude: Implementación de herramientas avanzadas para detectar y prevenir abusos, con casos exitosos reportados en Chile y México.
El impacto de las insurtechs fue otro eje central de su intervención. Arias analizó su influencia en el sector, clasificándolas en tres categorías:
- Nuevos modelos de negocio: Compañías que ofrecen seguros completos desde plataformas tecnológicas (neo insurance o full-stack insurtechs).
- Insurtechs de distribución: Innovadoras en la comercialización y asesoría de seguros.
- Habilitadoras tecnológicas: Optimización de procesos como emisión de pólizas, cobranza y atención al cliente.
Además, hizo un llamado a implementar regulaciones internacionales armonizadas para que estas innovaciones protejan al consumidor y minimicen riesgos.
Finalmente, Arias enfatizó que la digitalización y la inteligencia artificial deben ser herramientas al servicio del ser humano. Subrayó la importancia de establecer límites claros para evitar que estas tecnologías se conviertan en amenazas y garantizar que sigan siendo oportunidades para la industria y sus clientes.
Estas reflexiones resaltan la importancia de combinar innovación y regulación para fortalecer el sector asegurador de cara al futuro.
Durante su participación, Elisabeth Vogt de Weber reflexionó igualmente sobre la integración de la tecnología en el sector asegurador, destacando tanto sus oportunidades como los retos que presenta para los productores asesores de seguros.
“La tecnología nos ayuda a agilizar procesos, a presentar soluciones innovadoras y a llegar de manera más efectiva a los clientes”, señaló. Sin embargo, enfatizó la importancia de garantizar que las herramientas tecnológicas utilizadas cuenten con medidas robustas de seguridad para proteger la información sensible de los clientes. “Es crucial que las plataformas tengan respaldo adecuado, que la información se almacene y comparta de manera segura, y que se eviten fraudes o robos de datos”, agregó.
Vogt de Weber subrayó que, aunque la tecnología puede optimizar procesos, nunca podrá sustituir el valor humano que caracteriza a los asesores de seguros. “Los seguros generan confianza, y esta solo se logra a través de una relación cercana y cara a cara con el cliente”, afirmó. Para ella, escuchar activamente al cliente, entender sus necesidades y ofrecer soluciones personalizadas son pilares insustituibles de la profesión. “El cliente debe sentirse respaldado no solo por productos adecuados, sino también por la garantía de que detrás de cada herramienta tecnológica hay un asesor serio, comprometido y profesional”, puntualizó.
Asimismo, destacó los riesgos asociados con el uso de tecnologías gratuitas. Citando una ponencia previa sobre inteligencia artificial, recordó que las plataformas o aplicaciones gratuitas pueden poner en peligro la confidencialidad de los datos sensibles del sector asegurador. “Queremos tecnología, pero debemos invertir en herramientas confiables, registradas y profesionales. La información que manejamos es extremadamente delicada, y es nuestra responsabilidad protegerla”, concluyó.
Reflexiones sobre el reaseguro
Horst Ágata destacó los desafíos actuales del mercado de reaseguro, caracterizado por una reducción en la capacidad y un aumento en la complejidad de los riesgos. Indicó que el sector ha entrado en un «mercado duro» desde el 2023, donde los reaseguradores demandan condiciones y precios adecuados para subsanar los riesgos asumidos. «Cada año enfrentamos pérdidas aseguradas superiores a los 100 mil millones de dólares, incluyendo riesgos secundarios como inundaciones e incendios forestales, muchos de los cuales no están modelados», señaló Ágata.
El panelista subrayó la necesidad de evaluar cuidadosamente las relaciones con los reaseguradores, especialmente en países con menor regulación, para garantizar la solvencia y capacidad de respuesta al momento de un siniestro. «El precio es lo que pagas, pero el valor real de un seguro se evidencia al momento de cobrar un siniestro», afirmó, destacando la importancia de trabajar con socios de reaseguro confiables y calificados.
Sobre el cierre de la brecha de protección en América Latina
La brecha de protección en seguros representa un desafío crítico y, al mismo tiempo, una oportunidad significativa para el sector asegurador, especialmente en América Latina. Según Horst Ágata, solo el 18% de la población en la región está asegurada, en comparación con el 38% a nivel mundial. Esta diferencia no solo evidencia una subpenetración de seguros, sino también una carga financiera para los gobiernos, que terminan absorbiendo el costo de las catástrofes, afectando el desarrollo de los países.
Ágata también destacó la necesidad de simplificar los productos de seguros, haciendo referencia a la importancia de contar con textos claros y concisos en las pólizas. Productos más atractivos, como los paramétricos, y una mayor confianza hacia los clientes son clave para reducir esta brecha. Además, enfatizó que la tecnología y una colaboración estrecha entre todos los actores del sector serán esenciales para superar este desafío.
Por su parte, Recaredo Arias complementó este análisis haciendo referencia al estudio «La brecha del seguro» de Mapfre Economics. Este informe indica que el sector asegurador en la región podría crecer hasta 1.5 veces su tamaño actual, con variaciones según el país. Por ejemplo, mercados como Guatemala y Venezuela tienen un potencial de crecimiento significativo, con estimaciones de 4.5 y 7.8 veces, respectivamente.
Arias subrayó la importancia de los seguros inclusivos, que buscan incorporar a personas sin cobertura previa, y de los microseguros, que han enfrentado desafíos regulatorios y de altos costos de adquisición y operación, además de retos en cuanto a canales de distribución. También mencionó la necesidad de fomentar la educación financiera y adaptar la regulación para facilitar el acceso y uso de los productos. Según Arias, un modelo de negocio escalable y eficiente para distribuir microseguros es clave para que estos sean rentables para los productores.
Elisabeth Vogt de Weber afirmó que, durante el 2024, uno de los temas más destacados en la Certificación COPAPROSE fue el de los seguros paramétricos, una solución clave frente a la creciente brecha de protección que afecta tanto a Iberoamérica como al resto del mundo. Señaló que esta preocupación global demanda la creación de nuevos productos y enfoques que permitan afrontar de manera más eficaz los riesgos catastróficos que hoy impactan severamente a los países.
Vogt de Weber resaltó que la brecha de protección no solo refleja una falta de acceso a seguros, sino también la necesidad urgente de una reestructuración del modelo tradicional. Esto incluye explorar opciones como los seguros paramétricos, que permiten indemnizaciones rápidas basadas en indicadores predefinidos y, por otro lado, ampliar el alcance hacia otras soluciones como los microseguros.
Por ende, para la Presidenta de COPAPROSE, frente al aumento de riesgos derivados del cambio climático y otros fenómenos catastróficos, es esencial que todos los actores del sector —aseguradoras, reaseguradores y asesores productores de seguros— se unan para diseñar productos que sean más accesibles y efectivos para los clientes. Este esfuerzo no solo abarca el ámbito financiero, sino también un compromiso social para garantizar que la protección llegue a quienes más lo necesitan.
Finalmente, los tres panelistas coincidieron en que cerrar esta brecha requiere un esfuerzo conjunto de todos los actores involucrados: aseguradoras, reaseguradores, reguladores, productores asesores de seguros y organizaciones internacionales. Invertir en modelos innovadores, programas de educación y regulación adecuada será determinante para transformar esta problemática en una oportunidad para el desarrollo sostenible en América Latina.